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En un acto de protesta radical, hoy dio inicio la II Huelga de Hambre Nacional convocada por el Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (SUTEP). Esta medida, que pone en riesgo la vida de sus participantes, es una respuesta directa a lo que los docentes denuncian como una indiferencia del gobierno de Dina Boluarte y del Ministerio de Economía, liderado por José Arista, hacia las demandas del magisterio y la situación crítica de la educación en el país.

La huelga fue decidida de manera unánime durante la III Asamblea Nacional de Delegados del SUTEP, ante la negativa del gobierno de asegurar una educación de calidad y garantizar los derechos laborales de los docentes. Entre sus exigencias, el sindicato reclama un aumento del presupuesto educativo al 6% del Producto Bruto Interno (PBI), conforme lo estipula la Constitución y las recomendaciones internacionales. Además, demandan el cumplimiento de los acuerdos logrados en la negociación colectiva con el Ministerio de Educación (MINEDU).

Las principales demandas del SUTEP incluyen:

  • Aumento del presupuesto educativo al 6% del PBI.
  • Implementación de un plan para reducir la brecha en infraestructura educativa.
  • Pago de 400 soles por escolaridad a más de 73 mil docentes recientemente nombrados.
  • Aplicación de la ley que establece un aumento para auxiliares de educación.
  • Aprobación de un proyecto de ley que garantice un bono de 380 soles para maestros y auxiliares.
  • Incremento de bonificaciones para docentes en zonas rurales y de frontera.
  • Aumento salarial de 500 soles para docentes en 2025.
  • Pensiones dignas para jubilados.

El SUTEP ha enfatizado que esta huelga de hambre es una medida extrema pero necesaria, frente a lo que consideran una grave desatención gubernamental. Si sus demandas no son incluidas en el proyecto de presupuesto para el año 2025, que será presentado al Congreso a finales de este mes, el sindicato ha advertido con convocar una Huelga Nacional Indefinida en septiembre, lo que podría llevar a la paralización total de clases en todo el país.

El sindicato responsabiliza directamente a la presidenta Dina Boluarte y al ministro José Arista por las consecuencias de esta huelga y por una posible crisis educativa a nivel nacional. El SUTEP reafirma su compromiso con la lucha por una educación pública y de calidad, y hace un llamado urgente al gobierno para que actúe con responsabilidad.

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