Informe revela 7,303 denuncias de violencia sexual en escuelas de Ecuador
Un reciente informe de Human Rights Watch (HRW) ha revelado cifras alarmantes sobre violencia sexual en instituciones educativas de Ecuador. Entre enero de 2014 y junio de 2024, se registraron 7,303 denuncias de abuso sexual en escuelas y colegios del país. Los responsables incluyen docentes, autoridades escolares, guardias de seguridad, encargados de bares, conserjes y, en algunos casos, los mismos estudiantes, afectando a niños, niñas y adolescentes.
La Federación de Estudiantes Secundarios del Ecuador (FESE) y varios consejos estudiantiles han expresado su preocupación por estos incidentes y han denunciado la falta de respuesta del Estado. Los esfuerzos para abordar estas denuncias han sido, según ellos, ignorados.
El informe, titulado «Como poniendo parches: Ecuador progresa lentamente al combatir y prevenir la violencia sexual en las instituciones educativas», destaca el lento avance en la implementación de medidas preventivas, en contraste con el rápido aumento de los casos.
La organización subraya la necesidad de una respuesta más efectiva por parte del gobierno. Las medidas actuales no están a la altura de la urgencia y magnitud del problema, y se hace un llamado a cumplir el compromiso de tolerancia cero contra la violencia sexual en las escuelas.
A pesar de las declaraciones oficiales sobre medidas significativas desde 2020, la realidad en muchas instituciones es distinta. La falta de denuncias, protocolos desactualizados y una insuficiente socialización de estas medidas contribuyen a la impunidad.
Un caso emblemático es el de Paola G., que llevó a la Corte Interamericana de Derechos Humanos a emitir una sentencia contra el Estado ecuatoriano en 2020. En 2001, Paola, de 14 años, fue víctima de violación y abuso sexual por parte del vicerrector de su escuela fiscal en Guayaquil. El personal escolar no tomó medidas para protegerla, y en diciembre de 2002, Paola se quitó la vida. La Corte ordenó reparaciones a la familia y medidas para prevenir y erradicar la violencia sexual en las escuelas, pero el informe señala que poco se ha avanzado.
El documento insta a las autoridades a tomar medidas inmediatas y efectivas para proteger a los menores en las instituciones educativas y garantizar que los responsables de estos actos sean llevados ante la justicia.
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