Desempleo e Informalidad en Ecuador: Cifras del INEC contradicen las afirmaciones de Noboa

En medio de una creciente controversia, Daniel Noboa, presidente de Ecuador, ha afirmado que durante su administración se han generado 105 mil plazas de trabajo, destacando que estos son empleos estables y de calidad. Sin embargo, esta declaración ha sido duramente criticada, ya que tanto Noboa como su Ministra del Trabajo no han podido demostrar la veracidad de estas cifras.

La Ministra del Trabajo ha defendido las cifras mencionando que están basadas en los contratos de trabajo registrados en su cartera. No obstante, las estadísticas oficiales del ministerio revelan que hay más contratos de finiquito que nuevos contratos. Además, el Ministerio del Trabajo no ha podido confirmar un aumento en las afiliaciones a la seguridad social, ya que el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) no muestra un incremento en las afiliaciones.

Por su parte, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC) ha presentado cifras que contradicen las declaraciones del presidente. A diciembre de 2023, poco después de la posesión de Noboa, el INEC registró 3.072.499 personas con empleo adecuado. Sin embargo, tres meses después, esta cifra disminuyó a 2.978.366, indicando una reducción de más de 94 mil empleos en lugar de un aumento.

Las estadísticas del INEC también señalan una alta tasa de informalidad en el país, alcanzando el 53,4% en abril de 2024. Esto significa que más de la mitad de la fuerza laboral ecuatoriana trabaja en condiciones precarias, sin acceso a un salario mínimo o vacaciones.

El desempleo también afecta de manera desproporcionada a las mujeres, con una tasa del 5,6% en comparación con el 3,3% de los hombres, según datos de febrero de 2024 del INEC. En total, más de 350.000 personas están desempleadas en Ecuador, con una tasa de desempleo del 4,2% en febrero de 2024, representando un aumento de 0,3 puntos porcentuales respecto al mismo mes del año anterior.

Esta situación refleja una economía en contracción, influenciada por un presupuesto restrictivo, escasa inversión y un aumento de impuestos regresivos. Estas políticas han resultado en un incremento de la pobreza y la violencia, así como en la pérdida de empleos. Los empresarios, utilizando mecanismos legales, han podido despedir empleados sin mayores costos.