Violencia paramilitar a campesinos por una minera canadiense en Sigchos, Cotopaxi

El Frente Antiminero de Ecuador denunció el 11 de marzo, violentos enfrentamientos entre campesinos y paramilitares en la parroquia de Palo Quemado, Sigchos, provincia de Cotopaxi. Estos disturbios fueron resultado de la fuerza de choque contratada por la empresa minera canadiense Atico Mining, según informes de la organización.

Los campesinos, que se oponen al proyecto minero de la transnacional canadiense en la región, han sido blanco de ataques por parte de grupos paramilitares armados. El Frente Antiminero responsabiliza directamente a Daniel Noboa Azin, presidente de Ecuador, por las consecuencias de su política minera y alega que el gobierno incumple obligaciones legales y constitucionales relacionadas con el derecho a consulta y consentimiento previo, libre e informado de las comunidades.

La situación escaló desde el pasado 7 de marzo, cuando aproximadamente 30 personas armadas, vinculadas a una fuerza paramilitar llamada ‘Juntas de Defensa del Campesinado’, se concentraron en la parroquia Palo Quemado. Raúl Bayas, identificado como el líder de este grupo irregular, es acusado de alinearse con las corporaciones mineras desde 2021.

El Frente Nacional Antiminero informa que estos paramilitares han montado retenes ilegales en varios puntos, exigiendo documentación a los transeúntes sin uniformes ni identificaciones oficiales, y portando armamento de grueso calibre. Además, se han registrado ataques a campesinos defensores de derechos humanos y de la naturaleza.

El domingo 10 de marzo, la presencia paramilitar se intensificó con el ingreso de dos camiones y personal fuertemente armado, alojándose en las instalaciones de la empresa minera. La comunidad denunció que un comando paramilitar, supuestamente subordinado a la empresa, intentó incautar un envío de panela orgánica certificada, afectando una de las principales fuentes económicas locales.

El Frente Nacional Antiminero acusa al gobierno ecuatoriano de complicidad, señalando que estos actos coinciden con la participación del presidente Daniel Noboa en la Convención Mundial de Exploración y Minería en Canadá, donde se anunciaron acuerdos de inversión minera por valor de cuatro mil 800 millones de dólares.

Estos incidentes ocurren en vísperas de una consulta ambiental convocada por el Ministerio de Ambiente para el proyecto minero La Plata, que enfrenta una firme oposición de las comunidades locales.

La comunidad argumenta que el proyecto afectará sus vidas, la producción agrícola y campesina, así como contaminará los ríos esenciales para su subsistencia. La líder de la parroquia Palo Quemado recibió amenazas directas contra su vida, generando temor por su seguridad y la de su familia.

Este conflicto minero en Sigchos evidencia la actitud que tiene el Gobierno de implementar a toda costa las políticas neoliberales . Asimismo, la creciente resistencia de comunidades ecuatorianas ante la expansión de proyectos extractivos, mientras las organizaciones sociales e indígenas expresan su rechazo a la política minera del gobierno y la presencia de empresas extranjeras en el país.