La inseguridad en el sistema educativo persiste: el Gobierno de Ecuador no toma acciones efectivas

El Ministerio de Educación cambio a modalidad no presencial en dos centros educativos de la ciudad de Daule, ubicada en el área metropolitana de Guayaquil, tras el asesinato a tiros de un joven en la vía pública. La víctima, quien aparentemente era estudiante de una de estas escuelas, fue atacada mientras vestía su uniforme escolar y cargaba una mochila.
Este trágico incidente es solo uno de los muchos ejemplos que reflejan la alarmante inseguridad que afecta al sistema educativo en Ecuador. Según datos de la Unión Nacional de Educadores (UNE), desde noviembre y diciembre del año pasado, cuatro niños menores de 7 años fueron asesinados mientras dormían en sus casas en el Guasmo Sur, un barrio periférico de Guayaquil. Hasta agosto de 2023, la DINASEP reportó 380 menores asesinados al estilo sicariato, aunque el diario El Universo elevó la cifra a 455 niños, niñas y adolescentes asesinados en lo que va del año.
Además, los maestros y maestras del país viven bajo constante amenaza. Extorsiones, denominadas «vacunas», y amenazas de muerte por parte de grupos delincuenciales son parte de su día a día. Casos como el asesinato del profesor Galo Simón Balseca Cruz en una unidad de transporte público, luego de culminar su jornada laboral, evidencian la extrema violencia que afecta al gremio docente.
La situación es tan crítica que 205.289 niños, niñas y adolescentes han abandonado las aulas, principalmente debido a la pobreza. La migración forzada es otra consecuencia de esta crisis, con 3.895 niños ecuatorianos ubicados en pasos fronterizos de los EE. UU entre octubre de 2022 y septiembre de 2023, sin la compañía de sus padres.
Estas cifras y hechos reflejan un sistema educativo que no solo está fallando en su misión de educar, sino que también se ha convertido en un escenario de violencia y peligro. La UNE ha subrayado la necesidad urgente de una mejor articulación entre el Gobierno ecuatoriano, sus instituciones, las familias y la sociedad para abordar esta crisis.
La UNE y la sociedad ecuatoriana exigen respuestas inmediatas y efectivas del Gobierno y de las instituciones del Estado para proteger y asegurar un entorno seguro y propicio para el desarrollo integral de todos los estudiantes y maestros del país.