Grave amenaza a la educación pública en EE.UU.: Sindicatos latinoamericanos denuncian desmantelamiento y recortes

Las políticas promovidas por la administración de Donald Trump representan un ataque frontal contra la educación pública en Estados Unidos y sus trabajadores. Ante esta alarmante situación, el Comité Regional de la Internacional de la Educación América Latina expresó su solidaridad con la Asociación Nacional de Educación (NEA) y la Federación Americana de Profesores (AFT), principales organizaciones del magisterio estadounidense afiliadas a la Internacional de la Educación.

El anuncio de la posible eliminación del Departamento de Educación de EE.UU. ha encendido las alarmas dentro y fuera del país. Esta medida, impulsada bajo la excusa de «eficiencia gubernamental», significaría un retroceso en el acceso y garantía de una educación pública de calidad, beneficiando únicamente a quienes buscan hacer de la educación un negocio privado. Los sindicatos denuncian que esta política no solo ataca la educación, sino que también socava la democracia y las instituciones que garantizan derechos básicos para la población.

Además del desmantelamiento institucional, se ha manifestado un fuerte rechazo a la amenaza de despidos masivos en el sector público, lo que pondría en riesgo la estabilidad de miles de docentes y trabajadores de la educación. Estas acciones no solo precarizan la labor educativa, sino que afectan directamente a millones de estudiantes que dependen de la educación pública para su desarrollo.

Otro eje de preocupación es la creciente ola de deportaciones masivas, que ha impactado especialmente a comunidades migrantes en EE.UU. Sindicatos y organizaciones sociales han denunciado que las autoridades migratorias han irrumpido en centros educativos y lugares de trabajo, generando un clima de persecución y miedo entre estudiantes y docentes. Desde América Latina, se condena la complicidad de ciertos gobiernos regionales que han facilitado estas deportaciones, violentando los derechos de las personas trabajadoras migrantes.

Ante este escenario, el 4 de marzo se llevará a cabo una jornada de solidaridad en toda América Latina. Sindicatos y docentes vestirán de blanco y compartirán mensajes en defensa de la educación pública en EE.UU. Además, se realizarán reuniones y diálogos sobre el impacto de los recortes presupuestarios y la situación de los estudiantes migrantes. También se prevén movilizaciones frente a las embajadas estadounidenses en diferentes países, exigiendo el cese de estas políticas regresivas.

Desde América Latina, se reafirma el compromiso de luchar por la educación pública y denunciar los intentos de desmantelar derechos fundamentales. La educación no es un negocio, es un derecho, y su defensa trasciende fronteras.

Share Post
Written by
No comments

LEAVE A COMMENT

Verified by MonsterInsights